Un movimiento misionero para gente aventurera que quiere dar a conocer a Jesús a traves del globo
Brindamos capacitación práctica y construimos equipos en ubicaciones establecidas o exploramos nuevos lugares juntos. Mostramos a las personas cómo construir una base de apoyo para vivir y trabajar de manera sostenible para que puedan seguir el llamado de Dios.
Nuestro sueño es ver seguidores apasionados de Jesús de alrededor del mundo convertirse en hacedores de discípulos en las naciones.

¿Alguna vez has querido servir a Dios pero no sabías? ¿donde empezar?
Estuvimos en su lugar, cometimos muchos errores y aprendimos mucho en el camino.
Hemos ayudado a innumerables personas a discernir su llamado y las hemos apoyado para ingresar al campo misionero.
Donde hacemos Jesús conocido

Podemos ayudarte a dar el siguiente paso
Con décadas de invaluable experiencia, una red global de contactos y equipos en todos los continentes, nos encantaría ayudarle a aprender a abordar las misiones de una manera sostenible y práctica.
Creemos que la vida es una gran aventura.
y que cada persona tiene el potencial de ser pionera en nuevas formas de hacer cosas nuevas y explorar lo que Dios tiene para ella.
Hemos personalizado nuestros programas de capacitación para que funcionen para diferentes personas en diferentes fases de la vida.

Artículos de la comunidad
Un impacto duradero
Joanna nos cuenta sobre el mes en el que participó en el programa Impact de World Horizons, lo que experimentó y cómo eso le impactó.
Tim y Cath: Del Reino Unido a los Pirineos, a nuestros sesenta años
«Serán mis testigos… en Jerusalén, en Judea, en Samaria y hasta los confines de la tierra.» (Hechos 1:8)
Para Tim y Cath, miembros de Horizontes Mundiales, eso significó dejar el Reino Unido y comenzar una nueva etapa en el País Vasco francés. Su historia nos recuerda que el llamado de Dios puede llegar en cualquier etapa de la vida y siempre nos lleva a descubrir de nuevo su fidelidad.
Noé y Marta: Hasta los confines del desierto árabe
Incluso en lugares inesperados, Dios obra. El viaje de Noé y Marta en el Golfo Pérsico muestra cómo la misión de Dios llega hasta los confines de la tierra. (Hechos 1:8)